
Un cajero automático aumenta la seguridad, mejora la higiene, elimina los errores y la escasez de efectivo.
Dentro de una actividad comercial, la caja puede ser una zona muy crítica, es un espacio donde puede haber confusión, gente haciendo cola y, sobre todo, es donde se produce el intercambio y la custodia del dinero.
Un cajero automático aumenta la seguridad, mejora la higiene, elimina los errores y la escasez de efectivo.
Estas son sólo algunas de las razones por las que muchas empresas deciden instalar una caja automática.
La integración de Labware con Cashmatic facilita tu elección. Nuestro IQ POS con unos sencillos pasos se integra perfectamente con los cajeros automáticos Cashmatic, gestionando las operaciones de pago en caja y eliminando por completo la transferencia de dinero del cliente al operador.
Vuestro empleado no tiene que hacer nada más que las operaciones normales de caja para preparar la cuenta y supervisar el pago del cliente.